En un ambiente familiar y lleno de nostalgia, miles de personas asistieron ayer al VII Festival del Día del Salvadoreño, que se llevó a cabo en el Stampede Club, en la ciudad de Aurora, Colorado, Estados Unidos, en donde hubo música, rifas, concursos, comida típica y mucha diversión.
El evento fue organizado con varios meses de anticipación por Salvadoreños Residiendo en Colorado (SarCo), quienes buscan que los originarios de El Salvador se sientan cerca de su amada tierra cuscatleca.
La actividad comenzó al mediodía con el desfile de las banderas de El Salvador y Estados Unidos, posteriormente se entonó el himno nacional de ambos países.
El presidente de SarCo, René Mejía, dijo que dicha organización se formó con el propósito de apoyar a la comunidad latina, especialmente a la salvadoreña, por lo que en 2015 gestionaron un decreto para celebrar el Día del Salvadoreño en la referida ciudad.
«Siguiendo las tradiciones de El Salvador, nosotros queremos tener esa parte de socializar nuestra cultura con la gente de acá [Estados Unidos]. Vienen personas de otros países que disfrutan de este evento, ya que la idea es mostrar nuestra cultura y las comidas», manifestó Mejía.
Añadió que la ciudad de Aurora es la que tiene mayor diversidad en el estado de Colorado, por lo que, con la proclamación oficial, el Día del Salvadoreño se celebra el segundo fin de semana de agosto.
Durante el evento hubo ventas de pupusas, yuca frita, pasteles, elotes locos, atoles, refrescos naturales, entre otros. Además, los artistas salvadoreños Francisco Lemus, vocalista del Grupo Algodón, y La Chanchona de Tito Mira pusieron a bailar a los asistentes.
Los niños y los adultos disfrutaron de las ocurrencias del comediante Cocolito. También se contó con la participación del Grupo Kaoba y Media Luna; mientras que la cantante mexicana la Mariposa de Denver deleitó con su dulce voz; también el mago Rodrigo Ramos ofreció un espectáculo de lujo.
A las 4 de la tarde coronaron a la reina de SarCo 2023, Angie Guardado; a la princesa Carolina Arias y al príncipe Matthew Carvajal.
El salvadoreño René Hernández llegó a las 11 de la mañana al evento para degustar los diferentes platillos típicos y disfrutar la música. Aseguró que esta actividad lo hace sentirse cerca de su patria y familia. «Me siento contento de venir todos los años a este evento, ya que siento que estoy en mi país y se siente ese calor que solo los salvadoreños damos. Me encanta comer pupusas y el fresco de horchata. Siempre traigo a mi hijo para que venga a disfrutar», dijo Hernández.
Lilian Zepeda aprovechó el evento para vender minutas y recaudar fondos para su fundación. «Las jaleas y los jarabes de las minutas los hacemos en casa. Este dinero lo recogemos para los niños en El Salvador, ya que hacemos celebraciones en diciembre y llevamos diversiones a las personas que viven en los cantones [de la zona occidental]», aseveró la salvadoreña.
Terra Mare se prepara con su pizza con loroco para el Festival Salvadoreño