l Salvador se ha convertido en tierra fértil para inversiones en diversos rubros, gracias al clima de negocios y a la seguridad jurídica y ciudadana. Uno de ellos es el sector de bienes y manufactura en el que se ejecutan diversos proyectos, informó recientemente la ministra de Economía, María Luisa Hayem.
«En el sector de bienes y manufactura actualmente hay cinco zonas francas que están en proceso de construcción. En el pasado, a pesar de tener una ley que era amigable a la inversión y que ofrecía beneficios consistentes y sólidos importantes para las empresas, no existía el ambiente de negocios que es el incentivo más importante para que nuevas zonas francas se establecieran en el país», afirmó Hayem.
Hasta el año pasado, según datos del Ministerio de Economía (Minec), en El Salvador se registran unas 17 zonas francas que emplean a alrededor de 57,000 personas de forma directa y 126,000 de forma indirecta.
La funcionaria destacó que en el tintero de inversiones se encuentra, en fase de construcción, un proyecto en el sector de centro de llamadas.
«Hay un parque de ocho edificios que se está construyendo en Ciudad Arce, en La Libertad, y se espera albergar a call centers y empresas de tecnología que puedan ampararse a la Ley de Fomento a la Innovación, aprobada el año pasado», explicó.
Este tipo de proyectos se han generado gracias al trabajo conjunto con la Asamblea Legislativa, el Ejecutivo y la empresa privada, un esfuerzo importante para el crecimiento del país, añadió .
En esa misma línea, la funcionaria resaltó los proyectos de expansión que ejecutan empresas multilaterales que operan en el país, como Nestlé, Unilever, Telus, TP, pues esas inversiones derivan en el desarrollo económico, crecimiento en sus negocios. «Estamos viendo que hay un derrame económico y se está viendo un impacto positivo en todo el territorio nacional», afirmó.
Por otra parte, indicó que el año pasado 3,300 nuevas empresas se establecieron en el país, lo que contribuye a la generación de nuevos empleos.
Hayem también se refirió al crecimiento que han experimentado los diferentes sectores económicos del país, siendo construcción el que más apalancó la economía con una inversión de más de $2,000 millones, entre pública y privada.
El dinamismo que experimenta la industria de la construcción también se observa en los 49 edificios con propósito comercial y habitacional, que en la actualidad se construyen en diferentes puntos del país.
El atractivo que ahora ofrece el país para invertir también se refleja en la intención que empresarios de México, Estados Unidos, Colombia y Canadá, y otros países, han expresado para establecer operaciones en suelo salvadoreño.
«Hemos tenido la oportunidad de estar en constante comunicación con inversionistas en Colom-bia, sobre todo en el sector turismo. También hemos visto el interés de empresarios de Honduras y ampliaciones de líneas de productos de Guatemala, lo que esperamos que se traduzca en mayor inversión y producción», reiteró.