Al menos nueve abatidos y otros nueve heridos dejó como resultado un enfrentamiento ocurrido hoy entre agentes especiales antidrogas de Paraguay y supuestos narcotraficantes en el departamento de Canindeyú, región noroeste y fronteriza con Brasil.
Se trata del operativo «Ignis», cuyo objetivo fue desbaratar una estructura criminal especializada en el tráfico de drogas y armas en la zona fronteriza y que actuaba con extrema violencia contra otras facciones y agentes policiales y militares tanto paraguayos como brasileños.
Esta acción contra el crimen organizado fue fruto de la cooperación internacional con la Policía Federal y la coordinación interinstitucional con el Ministerio Público, la Fuerza de Tarea Conjunta (FTC) y la Policía Nacional, según informó la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad).
El reporte oficial detalla que se realizaron incursiones por tierra y aire y tres allanamientos entre las ciudades de Saltos del Guairá y La Paloma, departamento de Canindeyú, y fueron detenidas un total de 10 personas.
Entre los detenidos se encuentra uno de los dos objetivos principales de la operación, Ricardo Luis Picolotto, alias «R7», de nacionalidad brasileña, que según los investigadores está vinculado con la facción criminal Primer Comando da Capital (PCC) de Brasil, con la cual se había erigido como uno de los principales proveedores de armas con nexos en Paraguay.
La Fiscalía de Paraguay logró identificar a cuatro de los nueve supuestos criminales abatidos, entre los que se encuentra Rody Ramón Espinoza Amarilla (25), de nacionalidad paraguaya, que contaba con pedido de extradición de Brasil.
Durante el operativo además fueron incautados 30 fusiles, una ametralladora punto 50, 19 cargadores 7.62 y seis camionetas y camiones de gran porte, según detalla el informe.
El presidente de Paraguay, Santiago Peña, destacó la exitosa ejecución de la operación señalando que de esta forma están avanzando firmemente y con determinación hacia la meta de lograr un país más seguro para todos.
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