Los gobiernos de ARENA y del FMLN pagaban o solicitaban apoyo a organismos nacionales e internaciones para que desarrollaran estudios sobre el fenómeno de las pandillas en El Salvador y para que plantearan soluciones al problema social.
Los análisis se hicieron, pero no se resolvió el problema de inseguridad generado por los grupos criminales; más bien se agravó.
«Esos estudios que se pagaban a los grandes organismos para que vinieran a El Salvador no pasaban de ser eso: estudios. No daban soluciones a la violencia que la población estaba viviendo», señaló el analista Óscar Peñate en la entrevista de Noticiero El Salvador.
Junto con el analista René Martínez compararon el éxito que han tenido las medidas de seguridad implementadas por el Gobierno del presidente Nayib Bukele respecto a las administraciones gubernamentales anteriores.
En efecto, entes como la Organización de Estados Americanos (OEA) desarrollaron análisis sobre el fenómeno de las pandillas; incluso auspiciaron la tregua que el Gobierno efemelenista de Mauricio Funes hizo con cabecillas de las dos principales pandillas y sus facciones.
José Miguel Insulza, secretario general de la OEA, estuvo en el acto junto a los principales delincuentes.
Ambos analistas coincidieron en que precisamente la diferencia entre las estrategias pasadas y la del Ejecutivo actual radica en que se pasó de datos en documentos a acciones concretas para enfrentar a las pandillas y erradicarlas.
Martínez destacó que el presidente Nayib Bukele tuvo valentía, y las decisiones que tomó son las que han devuelto la tranquilidad a la población salvadoreña.
«Fue necesario que llegara el presidente Nayib Bukele para tener El Salvador actual. Estamos viviendo en un país distinto», mencionó.
Producto del éxito que las medidas de seguridad han tenido es que diversos rubros han comenzado a reactivarse con actividades que la población termina disfrutando.
El turismo y el comercio son dos rubros que muestran grandes signos de mejoría, ya que la ciudadanía goza de más seguridad y muchos establecimientos ya no pagan cuotas a los delincuentes para seguir funcionando.
Bukele ha reiterado que no dará un paso atrás hasta que la población tenga una paz duradera.