Clarté Clínica Visual es el nombre del negocio que Nataly Ventura, de 30 años, dirige en la ciudad de San Miguel. Ella es ciudadana estadounidense, hija de padres mexicanos y casada con un migueleño. En 2021, la familia decidió mudarse a El Salvador debido a un problema médico, y el anhelo de tener su negocio se concretó en junio del año pasado.
Nataly es una mujer alegre, decidida y dispuesta a hacer lo que sea necesario por su familia, pero en 2020, cuando aún residían en Estados Unidos, durante la pandemia por la COVID-19, se encontraba embarazada, con dos niños pequeños, encerrados a causa del virus, sin compartir con sus padres y hermanos; lo que le produjo depresión posparto. Todo esto le provocó daños en la piel y el cuero cabelludo.
«Con la esclerosis que tengo siempre me aparecía como algo pequeño en la piel y ya, pero en ese tiempo, con tanto estrés, enfermedades, noches de desvelos por los niños, hacer la escuela en la casa, fue fuerte. Me enfermé, se me llenó el rostro, se me cayó el pelo, y cuando ya se podía salir de la casa, estaba completamente llena y no podía salir», comenta.
Nataly visitó tres dermatólogos en Estados Unidos, quienes no le pudieron ayudar, únicamente le recomendaban relajarse.
En junio de 2021, la familia viajó a El Salvador por vacaciones y para buscar una solución a su estado de salud.
«Tenía miedo por la comezón en mi piel, acudí a la doctora Irma Gómez y en tres días estaba bien. Fue acá donde encontré la solución, sentí que me podía relajar, se respiró un aire nuevo en mi casa, pero cuando regresé a mi casa [en Estados Unidos] me sentí mal nuevamente y me cuestionaba qué estaba haciendo allá», cuenta Nataly. Entonces decidió hablar con su familia para mudarse a El Salvador.
«El 16 de junio de 2022 me vine para El Salvador, las puertas se me abrieron, y me involucré en el negocio que mi esposo tenía con un familiar. Me metí con todo, porque me sentía bien para hacerlo, sentía la energía, la autoestima para meterme en lo que me abrían la puerta, y nos ha ido muy bien», comenta.
El ambiente de seguridad que se vive en El Salvador fue una pieza fundamental para que Nataly decidiera radicarse en el país.
«En todos lados he sentido que hay seguridad y que siempre están tomando acciones preventivas, y cuando sucede algo, luego va todo el peso de la ley. Porque en Estados Unidos a uno se le va metiendo ese miedo de que no hay seriedad de quién puede tener armas, es tanto el estrés que se siente, todo bien apurado, que la gente no está bien», explica. Clarté Clínica Visual es una óptica situada en Plaza San Pablo, en San Miguel, y la familia ya está invirtiendo en una segunda óptica y esperan inaugurar a finales de este año.