« …que el día diez de febrero a eso de la doce del mediodía llegué a la casa de la mamá de ella [la víctima], y empecé a discutir con ella, a insultarla le puse la mano en el pecho, la empuje a la cocina, diciéndole palabras que no le agradan a Dios, en eso sonó el teléfono, lo agarré porque me estaban llamando del trabajo, su señoría me disculpo por lo que he hecho con ella y mis hijos…».
Lo anterior fue parte de lo confesado por W.L.T., de 41 años ante el Juzgado Especializado de Sentencia para una Vida Libre de Violencia y Discriminación para las Mujeres de San Miguel y por la que la jueza lo sentenció a tres años de cárcel y al pago de $1,500 en concepto de responsabilidad civil por el delito de expresiones de violencia contra las mujeres y amenazas con agravación especial en perjuicio de su excompañera de vida.
El proceso contra el imputado consta en las 10,921 denuncias que la Fiscalía General de la República (FGR) recibió entre enero de 2019 a diciembre de 2021 a escala nacional. A la luz de esos datos, el ministerio público atiende un promedio de diez casos por día.
En la denuncia contra W.L.T., la victima relató que al momento de la agresión ella estaba en la vivienda de su madre, situada en el municipio de Santa Rosa de Lima, La Unión, cuando llegó el imputado, quién es el padre de sus tres hijos. La señora contó que el hombre, en tono molesto, le pidió que conversaran, a lo que ella aceptó.
«Ya me contaron que andas con un detective, tengo fotos y videos de esa persona, y del carro en que andan. Contame la verdad para decirle a los bichos [mareros] que todo es mentira, porque por andar con un detective te van a hacer daño. Porque sos la madre de mis hijos no quiero hacerte, ni que te hagan daño», fue la primera amenaza que el imputado profirió contra la víctima.
La señora detalló que al sentir la agresividad con la que hablaba su expareja optó por levantarse para evitar la discusión, pero el agresor comenzó a ponerle uno de sus dedos en el pecho, al tiempo que le expresaba que él podía hacer lo que quisiera con ella, además le hacía mates que sacaría de su espalda algún arma.
«Sos pendeja, mírame a los ojos, que ya no vas a andar con ese pendejo, te voy a ayudar comprando cosas a los niños. Te hubieras endamado con cualquier otra persona, sos una dunda», le decía el imputado.
Tras esas palabras la empujó hacia la cocina donde la tomó del cuello. Justo en ese momento apareció la niña de dos años y el hombre salió de la cocina gritándole , «sos peor que una perra, porque la perra anda los perritos y vos los dejas botados», luego se sentó en una silla, tomó el teléfono, y dijo ante un interlocutor: «mira te acordás del problema de la mamá de los niños, hay te voy a mandar la foto de esos c…, y ella ya tiene luz blanca, que la tuviera vigilada que cualquier cosa estuviera pendiente».
El hombre finalizó la llamada y después se dirigió a ella, sugirió que se fuera para Honduras para que no le pasara nada a los niños, además no quería que se acompañara con otro hombre que les pudiera hacer daño a los menores de edad.
En la denuncia la víctima amplió que estuvo acompañada siete años con el imputado y que decidió separarse hace dos años para tratar de frenar a violencia intrafamiliar.
En todo ese tiempo el agresor la amenazó constantemente con que iba a matarla, agregó que la obligaba a sostener relaciones sexuales en presencia de los niños, quienes la observaban llorando, y que ahora está molesto y no la deja en paz, bajo el argumento de que trabaja para darle sustento a los hijos de ambos.
POLICÍA Y FISCALÍA CAPTURARON A 4,136 AGRESORES
Los datos de la Dirección de Análisis, Técnicas de Investigación e Información (DATI) de la FGR detallan la captura de 4,136 acusados por expresiones de violencia contra las mujeres entre el 2019 y el 2021. Con respecto a los departamentos donde más registraron denuncias por el referido ilícito expone que en San Salvador recibieron la mayoría de casos con 3,915, le sigue La Libertad [1,332]; Santa Ana [1,655], Ahuachapán [924]; San Vicente [748], Sonsonate [502], mientras que el departamento donde menos denuncias recibieron fue Morazán con 56.
CONDENADO ACTUÓ CON DOLO, ODIO Y MACHISMO
Posterior a la valoración realizada por la juez determinó que el imputado obró con dolo directo al realizar acciones que vulneran los derechos humanos de la víctima, y el derecho que esta tiene a vivir una vida libre de violencia y discriminación, acciones contra la persona del sexo femenino, que están prohibidas por la ley.
De igual forma con las pruebas presentadas por la representación fiscal, la juzgadora acreditó que la violencia se motivó por creencias y valores machistas que degeneraron en misoginia, como odio y menosprecio hacia las mujeres, «por lo que resuelve declarar responsable penal y civilmente al imputado por los delitos mencionados, suspendiendo condicionalmente la ejecución de la pena, decreta medida de reparación del daño y ordena medidas de protección».
Entre las medidas dictadas están: la prohibición de acercamiento, comunicación por cualquier medio o llegar al lugar de residencia o trabajo de la víctima, abstenerse de hostigar, perseguir, intimidar, amenazar o realizar otras formas de maltrato en contra de la señora o de cualquier otra persona de su grupo familiar que compartan la misma vivienda; también el imputado no debe ingerir bebidas alcohólicas, estupefacientes, alucinógenos o sustancias que generen dependencia física o psíquica.