Los Enanitos Verdes tienen clara la idea: la única muerte verdadera es el olvido y, por ello, darán el banderillazo de salida a una nueva gira en la que buscan mantener viva la memoria de Marciano Cantero, exvocalista y líder de la banda, a través de los grandes éxitos de una de las mejores bandas de rock de América Latina.
Así lo define Felipe Staiti, guitarrista de la agrupación y quien ha tomado el rol de cantar los éxitos que se inmortalizaron a través de la voz de Cantero. Staiti define esta nueva etapa como un tribuno a la memoria y legado de Cantero y una forma de mantenerlo con vida entre las armonías y letras de las grandes canciones de Enanitos Verdes.
Los Enanitos Verdes se presentarán en El Salvador este próximo sábado 20 de abril, en el centro de eventos Salamanca, en Nuevo Cuscatlán, La Libertad, desde las 8:00 de la noche, en una velada para recordar grandes temas como «Lamento Boliviano», «Eterna Soledad», «La Muralla Verde», «Tu Cárcel», entre otros.

¿Qué significa para Enanitos Verdes esta nueva visita a El Salvador?
Es renovar el romanticismo, el romance con la gente de El Salvador que supimos construir por varios años. Ya bastante tiempo que no pisamos su hermosa tierra, así que es una alegría enorme poder volver. Tenemos mucho por mostrarles y contarles, muchas canciones para compartir con ustedes.
Es una nueva etapa en Enanitos Verdes tras la lamentable partida de Marciano Cantero. ¿Cómo está siendo este nuevo proceso?
Enanitos Verdes empezó hace muchos años con Marciano, en mi casa, en mi habitación. Fue como esa piedra que uno tira y no sabe a dónde va a caer. Los años fueron pasando y con Marciano construimos todo lo que fue Enanitos Verdes. Lamentablemente, Marciano falleció en 2022 y teníamos dos opciones: quedarnos llorando la pérdida y dejando que todo se diluyera junto con la falta de memoria porque, como siempre he dicho, la única muerte real es el olvido, o seguíamos adelante. Antes, yo cantaba dos o tres canciones en vivo y hacía los coros en la mayoría, las que llevaban la voz de Marciano.
Fue así como comencé a hacerme cargo de ser la voz líder y pusimos un par de coros. Obviamente el lugar de Marciano es irremplazable y por eso no quisimos poner a alguien más porque ese lugar, el lugar de Marciano, es irremplazable. ¿Quién va a estar ahí cantando y haciéndose cargo de esas canciones y que pueda transmitir ese sentimiento sin haber tenido historia con nosotros? Nadie. Por eso sumamos músicos, sumamos coros, pero nos quedamos con que nuestra historia, la de Enanitos Verdes, ha sido de reinvenciones.
Hemos pasado por muchas cosas, obvio la más fuerte ha sido la partida de Marciano, pero el espíritu de seguir haciendo música continúa. En algún punto es preferible honrar la memoria de Marciano con eso que nos unió que es la música, a dejar que todo se pierda en el océano infinito del olvido.

Ese legado de Enanitos Verdes ha logrado mantenerse durante muchos años. ¿Cuál ha sido clave para lograrlo?
Yo creo que la clave son las canciones. Las canciones han sabido atravesar generaciones. En los conciertos vemos público de mi generación o de otras generaciones. La gente que va a los conciertos también vive una juventud eterna, eso es porque las canciones cobran una pertenencia. Aunque no pertenezcan a sus generaciones, las hacen propias.
Creo que algo que nos ha beneficiado es que nunca hemos sido un grupo de moda y las modas, así como llegan, así desaparecen. Nunca fuimos un grupo de moda y ahora nos hemos transformado en un clásico, por decirlo de alguna forma. Como no hemos sido una moda, hemos logrado sobrellevar el paso del tiempo, es como un río que fluye y que no se detiene, como suele pasar cuando las cosas se establecen como una moda. La única llave del éxito son las canciones.
En tu caso, ¿cuál es una de las canciones más significativas de los Enanitos Verdes?
Creo que todas las canciones, en algún punto, tienen sentimientos buenos y sentimientos malos. Hay canciones que traen recuerdos no tan lindos, o momentos de tensión. Es difícil responder esta pregunta porque, por lo general, los éxitos son éxitos por la gente. Si las canciones gustan a la gente es algo bueno porque es como la palmada en el hombro que nos dice que está bien lo que estamos haciendo.
Pero creo que «Mariposa» es una de las canciones con mucho sello de Enanitos Verdes y con un mensaje que, ahora, cobra mayor preponderancia, porque ahora Marciano es una de esas mariposas que alzó vuelo y se nos fue.

Hablemos del show en El Salvador. ¿Qué tienen preparado para esa noche?
Primero, estamos en un momento en que tocamos canciones de nuestra historia. Podríamos tomar una canción de cada álbum y tendríamos un set list. Pero, este año celebramos el 30 aniversario del disco «Big Bang», en el que viene «Lamento Boliviano», así que queremos honrar ese gran disco y que fue una bisagra de la banda en el 94. Estamos tocando canciones de ese disco que casi no las habíamos tocado tanto en vivo. Por su puesto, también tocamos las canciones que la gente quiere escuchar. Se hace un show entretenido. Nos animamos a tocar alguna de las canciones nuevas que estamos trabajando. La vamos a pasar bien.