Implementar soluciones basadas en la naturaleza brinda beneficios a los habitantes y al sector privado. Así lo afirma Carolina Usache en el pabellón del CAF-Banco de Desarrollo de América Latinoamérica y El Caribe, en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP28) que se desarrolla en Dubái, Emiratos Árabes Unidos.
Usache es gerente de Acción Climática de WRI, Colombia, y según detalló, las soluciones basadas en la naturaleza han demostrado efectividad en la crisis económica generada por la pandemia de COVID-19, además, se tienen registros de que por cada dólar invertido en las altas montañas se obtiene un retorno de $7 a $30.
Asimismo, más del 70 % del ingreso global de la economía depende de la naturaleza, pues en estos procesos se utilizan recursos como el agua, la polinización, el oxígeno y otros servicios ecosistémicos que se necesitan para mantener las especies. «El sector privado tiene muchas ganancias, tiene experiencia e innovación. Esas alianzas público-privada permiten acelerar las acciones climáticas, que actualmente es un tema urgente», dijo Carolina Useche.
Esta evidencia sostiene una premisa que debatieron los especialistas sobre el incremento de la participación del sector privado en las acciones climáticas, pues una mayor inversión de capital privado puede acelerar la transición hacia las energías renovables y la economía circular.
Según informó Peter Thomson, enviado especial de la ONU para los océanos, las petroleras obtuvieron $5 billones de ganancias este año, y la Agencia Internacional de Energía con sede en París publicó un informe que indica que la industria del petróleo y el gas solo aporta el 1 % al costo de transición hacia las energías renovables. «Si ves los carteles en las autopistas, crees que ellos están liderando el camino, pero no es así. Así que puedes ver dónde está el problema», señaló el emisario de la ONU.
Cabe destacar que ayer en la COP28, 50 empresas responsables del 40 % de la producción global de petróleo firmaron una carta de compromiso para descarbonizarse hasta 2050.
Eso reafirma las aseveraciones de, Patricia Zurita, directora de Estrategia Conservación Internacional, quien indicó que es posible mantener el equilibrio entre la producción económica y la restauración de ecosistemas. «Lo que necesitamos es ambición de los Gobiernos y de la empresa privada», afirmó.
La especialista reiteró que acciones como la plantación de diversidad de árboles forestales y comerciales puede generar un ingreso que atrae inversión privada, el cual es importante para afrontar el cambio climático. «Se necesitan estos ingresos del sector privado para fomentar la economía verde, elevando el rol de la naturaleza y de los ecosistemas», indicó.
Otra área donde las petroleras deben aumentar su contribución es en la protección de los océanos ya que el 90 % de la vida está en este ecosistema, y el 95 % de la biomasa de los océanos es microbiana, es decir bacterias, fitoplancton, zooplancton. Además, el 50 % del oxígeno del mundo proviene de los océanos. «El organismo fotosintético más pequeño es el ploclorococo, y todos los niños deberían saber sobre este organismo porque produce el 20 % del oxígeno de la biosfera. Todos estos conocimientos sobre el océano tienen un impacto en la economía, la salud, la seguridad alimentaria y la producción energética», detalló Thomson.