Con tecnología de última generación las fuerzas de seguridad han incursionado a los nueve municipios de Cabañas para extraer a los remanentes de las pandillas que habían quedado delinquiendo en ese departamento ubicado en la zona norte de la zona paracentral.
Desde el pasado 1 de agosto el presidente, Nayib Bukele, ordenó instalar el cerco de seguridad desplegando a 7,000 soldados y 1,000 policías para cerrar todos los puntos de salida de los pandilleros.
Por su ubicación, Cabañas es un departamento con zonas montañosas que conectan con el departamento hondureño de Lempira, y los departamentos de Chalatenango, San Vicente, Cuscatlán y San Miguel.
«Sepan que contamos con toda la tecnología y los recursos para combatir y extraer al último remanente terrorista en la zona», publicó el ministro de Justicia y Seguridad, Gustavo Villatoro.
En las fotos publicadas por la Policía Nacional Civil (PNC) se observa la utilización de drones con los cuales se está patrullando y verificando la presencia de las pandillas.
Los drones en manos de la Policía son totalmente diferentes a los tradiciones ya que tienen sensores de calor, alcance de varios kilómetros y capacidad para elevarse a más de 500 metros para no ser detectados ni interceptados por los terroristas que se han desplazado a la zona rural para eludir los controles de las autoridades.
Con la cámara térmica se puede captar la presencia de pandilleros y cerrarles todas las rutas de escape, de esa manera son capturados y puestos a la orden de la Fiscalía para que los procesen por agrupaciones ilícitas y otros delitos relativos al crimen organizado.
El Gobierno del presidente Nayib Bukele, dotó a la Policía y Fuerza Armada de recursos y tecnología desde que implementó la fase IV del Plan Control Territorial denominada Incursión.
Esos medidas tecnológicos se han convertido en herramientas claves para policías y soldados en el cerco de seguridad en Cabañas ya que con los drones están realizando los patrullajes virtuales para identificar zonas a intervenir por tener presencia de pandilleros.
Más de 30 pandilleros han sido detenidos entre ellos cabecillas que estaban delinquiendo en el departamento de Cabañas, les han decomisado armas de fuego y otros ilícitos.
En los nueve municipios el trabajo se ha fortalecido con el despliegue de unidades especializadas de la Policía, entre ellas la División Élite contra el Crimen Organizado (DECO).
«Como resultado, estamos extrayendo a más terroristas que tendrán que pagar en prisión por todo el daño que han causado por décadas a nuestra población», sostuvo el titular de seguridad.