El Gobierno del presidente Nayib Bukele ha respetado los derechos humanos y ha dado muestras del respeto a las garantías constitucionales de la población durante la implementación del Plan Control Territorial (PCT) y del régimen de excepción.
Del 2 al 4 de diciembre de 2019, el Gobierno permitió que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) realizara al país una visita «in loco» para comprobar la situación en áreas como la seguridad pública, privados de libertad, las mujeres y las personas migrantes.
En ese momento el Ejecutivo ya implementaba el PCT para combatir a las pandillas, y la CIDH destacó que entre las fases de ese plan se contempla «la búsqueda de la recuperación de la gobernabilidad de los territorios, la prevención y, muy particularmente, la reconstrucción del tejido social».
Asimismo, la CIDH dijo que valoraba positivamente el «reconocimiento por parte del Estado de la seguridad ciudadana como una prioridad» y reconoció «los esfuerzos del Estado para desarrollar una política de seguridad ciudadana integral con la participación de las diferentes agencias gubernamentales tanto para prevenir como para perseguir la criminalidad».
Aparte de la visita de esta comisión, el Gobierno permitió en junio pasado que el entonces procurador de los derechos humanos, José Apolonio Tobar Serrano (electo por la oposición política en la legislatura 2018-2021), visitara las cárceles para verificar el respeto a los derechos humanos de los privados de libertad. El funcionario no reportó irregularidades, aunque el informe no lo hizo público.
El 15 de octubre pasado, el presidente Bukele se reunió con su Gabinete de Seguridad, y en esa reunión participó la nueva procuradora de los derechos humanos, Raquel Caballero de Guevara, a quien instó a garantizar el respeto de los derechos de la población honrada.
El pastor del Tabernáculo Bíblico Bautista Amigos de Israel Central, Toby júnior dijo ayer en una entrevista con «Diario El Salvador» que él también está a favor de que se garantice el respeto a los derechos humanos de los «ciudadanos honestos».
Contó que, al visitar las cárceles para predicar, él y el resto de los pastores han visto respeto a los derechos de los presos y amplias mejoras en el sistema penitenciario nacional.