El informe «El Estado de la mype 2023: la otra cara de la economía» desvela una interesante paradoja. Al comparar los salarios de los diversos sectores y segmentos de las micro y pequeñas empresas (mypes) informales con los del sector formal revela que, en promedio, los trabajadores informales ganan 14 % menos que sus contrapartes formales. Se estima que un millón de salvadoreños trabaja en las mypes informales, mientras que 800,000 se encuentran empleados en el sector formal privado, usualmente en medianas y grandes empresas.
Sin embargo, estas cifras parecen ocultar una realidad más compleja. Si bien es cierto que los salarios son inferiores en el sector informal, la liquidez disponible de estos trabajadores a menudo resulta ser mayor, con la única excepción de aquellos del sector agropecuario (ver tabla). ¿Podría esta disparidad ser una de las razones por las que se vuelve cada vez más difícil contratar en ciertos sectores formales? ¿Por qué se quejan algunos empresarios de que los trabajadores abandonan sus empleos con sorprendente facilidad?
En aparente contradicción, las mypes informales parecen especialmente atractivas, sobre todo para los trabajadores de las generaciones Z y «millennials». Veamos algunas de las razones:
UBICACIÓN DE LA OFERTA LABORAL FORMAL
El tiempo de traslado y los costos ocultos que conlleva son factores de gran importancia para los jóvenes. Muchos viven en zonas alejadas de los centros de trabajo debido a la segregación social y territorial y, en algunos casos, estos costos adicionales pueden representar hasta el 15 % de sus ingresos netos. Resulta comprensible que un trabajador prefiera un empleo informal cercano a su hogar, que otro muy distante que le resta que le puede llegar a quitar hasta el 30 % del tiempo de su día productivo.
MEJORAS EN LOS SERVICIOS DE SALUD
A medida que los servicios públicos mejoran en las zonas periféricas, suburbanas y rurales, muchos trabajadores, especialmente los más jóvenes, no ven un beneficio inmediato en las cotizaciones del Seguro Social y tienden a considerarlo una carga a sus ingresos. Los jóvenes priorizan los ingresos reales más que los ahorros futuros. Es notoria la mejora en los sistemas de salud en algunas zonas, debido al aumento en el presupuesto nacional de salud.
INGRESOS REGULARES Y FLEXIBILIDAD
Un aspecto que los empresarios de las mypes informales parecen comprender bien es la importancia de pagar a sus trabajadores de manera recurrente. Solo el 20 % de las mypes paga a sus trabajadores de manera mensual, siendo los pagos diarios y semanales los que juntos son los más comunes. Esto conlleva ventajas obvias para los trabajadores, ya que este sistema de remuneración los hace menos inclinados a tener problemas de liquidez, menor propensión al sobreendeudamiento y un mejor control de sus finanzas personales.
En conclusión, para muchos trabajadores los empleos locales, la flexibilidad laboral y la mayor disponibilidad de ingresos netos son factores determinantes en la elección del empleo a aceptar.
Así que, ¿ganan menos los trabajadores informales que los formales? A pesar de lo que comúnmente se piensa, los trabajadores informales, en muchos casos, tienen ingresos netos mayores y más tiempo disponible para invertir en actividades recreativas, iniciar emprendimientos o mejorar su formación profesional o técnica.
En muchos casos, los empleos locales que ofrecen las mypes parecen proporcionar a los trabajadores informales mejores condiciones de vida y oportunidades de crecimiento, siempre y cuando estas ventajas se aprovechen para fines productivos. Esta realidad plantea desafíos mayúsculos para las políticas tributarias y de formalización de las mypes.