«Sinceramente una de las cosas que a mi me alejó de la violencia del país fue esto, fueron los videojuegos, y aquí estoy sumamente encantado con esto, ver a los niños que esto sea ahora su entretenimiento, su distracción lejos de la violencia, lejos de todo, o sea no se quien puede estar en contra de esto, la verdad», expresó Juan Santamaría, mientras juega en una de las consolas con las que está equipado el Centro Urbano de Bienestar y Oportunidades (CUBO) situado en la colonia Zacamil de Mejicanos.
Santamaría es uno de los miles de jóvenes que a diario se benefician de los servicios ofrecidos en ese CUBO, que forma parte de la estrategia de seguridad del Gobierno del presidente Nayib Bukele, contemplados dentro de la fase 2 del Plan Control Territorial (PCT) denominada Oportunidades.
Estos centros tienen la finalidad de proporcionar mejores opciones de desarrollo para jóvenes de zonas catalogadas con mayor vulnerabilidad ante la criminalidad que por muchos años afectó a los salvadoreños, pero esa realidad está cambiando debido a la exitosa estrategia de seguridad de la administración actual y que fue repotenciada con la puesta en marcha del combate frontal a las pandillas, que ha permitido a los jóvenes transitar por su territorios con tranquilidad y visitar los CUBO para formarse en diversos talleres y actividades.
En la inauguración del CUBO del reparto Santa Lucía de Mejicanos, el presidente Bukele manifestó que en los gobiernos de ARENA y el FMLN muchos de los jóvenes se fueron por el mal camino por culpa de un Estado que no les cumplió, que no les dio oportunidades de otra cosa, «lastimosamente nosotros no podemos perdonar el crimen, no podemos decir, si esta persona asesinó porque la sociedad le falló o esta persona asesinó porque no tenía oportunidades».
Bukele afirmó que la estrategia de seguridad que ejecuta su Gobierno ha logrado que «los jóvenes ya no sean arrancados de sus familias por los asesinatos, sino que ahora hay tranquilidad que los niños y jóvenes estarán bien».
Santamaría y uno de uno de sus amigos avanzan en el juego y da fe de la seguridad brindada por el gobierno, además agradece por la nueva oportunidad de desarrollarse en un lugar libre de violencia pandilleril. «Que realidad más bonita con la que ahora se van a criar los jóvenes, son buenos equipos, buenas consolas, buen equipo, buenos libros los que hay en estos CUBO», afirma.
Stanley Flores es capacitador de informática del CUBO Luigi Doze, ubicado en el reparto Santa Lucía y detalla que en ese centro se desarrollan diferentes actividades que contribuyen a la educación y formación física y artística de la niñez y juventud.
«Los centros cuentan con áreas, materiales y equipos de diferentes disciplinas, como estudio de grabación, gimnasio, área infantil con juegos didácticos, consolas de videojuegos, espacios para clases, cancha de basquetbol, libros de diferentes géneros, computadoras e internet», asegura Flores.
Agregó que también se imparten cursos de inglés, batucada, robótica, pintura, dibujo, fotografía, video, zumba, danza, karate y marketing digital.
Para el experto en seguridad y criminología, Ricardo Sosa, los CUBO son el rostro más visible y la carta de presentación de la Fase II del PCT, debido a que son espacios para prevenir la violencia, generar sana convivencia, evitar una vida de ocio para niños, adolescentes y jóvenes. «El impacto ya se puede medir, ya disponemos de evidencia de lo que representa como una estrategia de prevención de la violencia. Los CUBOS han generado alto impacto en todas las edades, incluso adultos. Y se convierten en un modelo a replicar en América Latina».
Por su parte, el criminólogo, Misael Reyes, opinó que con estos centros se está logrando el empoderamiento del Estado a través del gobierno, pues toma de raíz el problema, «El gobierno está dándole la atención que ofrecía la mara, la aldea, al hacerlos sentir parte de una institución, la mara es una institución delincuencial y con eso (CUBO) el gobierno evita que la gente, que los niños se interesen en las instituciones delincuenciales criminales», dijo el especialista.
Santamaría continúa su estancia en el centro y mientras lee un libro, expresó, «vean ahora el sano esparcimiento de los jóvenes, el tema de la importancia de la educación. Lo voy a repetir los que tenemos entre 18 y 25 años, antes teníamos que ir a pagar a un cibercafé para con suerte jugar el FIFA, pero ahora los jóvenes lo pueden hacer acá con toda tranquilidad».