Las familias del cantón La Danta de Ahuachapán, afectadas a inicios del año por un enjambre sísmico, recibieron una ayuda especial enviada por el Papa Francisco, la cual fue entregada por el Nuncio Apostólico, su representante en el país, Monseñor Luigi Roberto Cona, quien visitó el cantón.
La ayuda enviada consiste en insumos para el hogar como camas, colchonetas, frazadas, cocinas, juegos de comedor, entre otros, con la cual podrán equipar sus hogares y llevar a cabo sus tareas cotidianas.
«El corazón de Papa Francisco está con ustedes, ánimo, sigan adelante, no se detengan. Se perdieron cosas materiales, pero la vida es un tesoro muy grande que tenemos», manifestó el Nuncio Cona durante la entrega de la ayuda papal.
El enjambre sísmico, que se prolongó por varias semanas, causó daños en muchas viviendas del cantón, las cuales fueron declaradas inhabitables y obligó a las familias a dormir en tiendas de campaña instaladas en los patios de las casas.
Varias familias, además, perdieron sus pertenencias al derrumbarse las casas donde residían, las cuales fueron derribadas durante los primeros sismos.
«En la vida hay que seguir adelante a pesar de las dificultades como esta que ustedes han sufrido. Hermanos de La Danta, siéntanse amados por Dios», agregó el representante del Papa en nuestro país.
Esta es la segunda visita del Nuncio a la comunidad, luego que en febrero pasado también visitó a las familias afectadas por los sismos.

«Lo que ustedes están haciendo es una gran bendición, como comunidad quiero darles las gracias de todo corazón, pedirle a Dios que les bendiga siempre y al Papa muchas gracias por la bendición que nos están dando este día con esta donación, gracias al Nuncio Apostólico también», dijo una de las mujeres beneficiadas con la ayuda.
De acuerdo a las cifras de Protección Civil, fueron más de 2,000 las viviendas afectadas por el enjambre sísmico, que tuvo un mayor impacto en los municipios de San Lorenzo y la cabecera departamental de Ahuachapán, además de parte del territorio guatemalteco.