Cientos de unidades de transporte de carga de toda Centroamérica iniciaron este martes el retorno a sus países luego de estar más de 30 días varados en la provincia panameña de Chiriquí, fronteriza con Costa Rica.
La liberación del transporte de carga se da dos días después de que el presidente salvadoreño Nayib Bukele, solicitará a los líderes civiles y autoridades panameñas la habilitación de un corredor humanitario para los choferes salvadoreños retenidos.
«Apelando a las históricas relaciones de amistad y cooperación existentes entre El Salvador y Panamá, nuestro país hace un llamado a las autoridades competentes y a los líderes de la sociedad civil que mantienen los cierres de vías a que habiliten un corredor humanitario, para que nuestros compatriotas puedan salir de Panamá a la mayor brevedad posible», rezaba la comunicación oficial emitida a través del Ministerio de Relaciones Exteriores.
A la solicitud, el líder indígena de la comarca Ngäbe-Buglé, Toribio García, respondió que están dispuestos a permitir la salida de los conductores salvadoreños.
«Nuestra lucha no es contra los camioneros de Centroamérica, es contra el Gobierno opresor de Panamá que ha querido vender nuestra patria a la empresa extranjera para que destruya nuestra tierra», afirmó García.
La nación centroamericana se encuentra sumida en un alza de descontento, protestas y bloqueos debido a la oposición de varios sectores sociales a un acuerdo con la minera canadiense First Quantum Minerals; sin embargo este martes se conoció que la Corte Suprema de Panamá declaró inconstitucional el contrato de concesión de la mina.