Tras siete meses del lanzamiento de las medidas antiinflación impulsadas por el presidente Nayib Bukele para proteger la economía de la población ante la escalada de precios internacionales, El Salvador ha logrado manejar un mercado con suficiente abastecimiento de productos.
El presidente de la Defensoría del Consumidor (DC), Ricardo Salazar, dijo que desde marzo pasado solo en materia de alimentos se han realizado 106,714 inspecciones.
Las acciones han contribuido a que los precios no se disparen y que los ciudadanos tengan disponibilidad de los productos, y señaló que en el caso particular de los granos básicos no existen condiciones en el país para que la oferta disminuya o haya alzas de precios.
«Dentro de los productos de la canasta básica, los granos básicos han sido una de las principales apuestas de este Gobierno a efectos de poder garantizar las diferentes fuentes de abastecimiento», dijo.
Salazar explicó, que además de la cosecha nacional al mercado, los flujos de importación granos básicos se mantienen estables y que «esto ha permitido que, en materia de maíz, por ejemplo, el país tenga una condición mucho menos vulnerable porque las fuentes de abastecimiento tienen firmeza».
En cuanto al frijol, afirmó que las verificaciones han encontrado que los inventarios de los grandes distribuidores tienen en existencia entre 600 y 1,000 quintales, lo que habla de un mercado vasto para la demanda nacional.
Asimismo, afirmó que la Defensoría ya se encuentra tras los comercializadores e importadores que, excusándose en el impacto de la tormenta Julia, incurren en prácticas especulativas para encarecer los precios, hasta en $10 por quintal de maíz, lo que genera alzas por libra que van de los $0.10 a $0.15.