Comprar ahora y pagar después suele ser tentador, sin embargo, antes de tomar una decisión debemos preguntarnos ¿si esta compra puede esperar o es una necesidad apremiante y si estaremos en la capacidad de honrar más adelante el pago de esta? Hacerlo sin planificación ni responsabilidad puede generar un problema de sobreendeudamiento en nuestras finanzas a futuro.
Comencemos definiendo ¿qué es el sobreendeudamiento? Este es un estado financiero que afecta a las personas cuando no tienen o no pueden generar suficientes ingresos para cumplir con el pago de la deuda contraída. Es decir, cuando las deudas superan los ingresos que se obtienen y, por lo tanto, imposibilitan cumplir el pago de las obligaciones.
En seguida, debemos responder la pregunta ¿cuáles son las causas del sobreendeudamiento? Una de las principales causas es la falta de control en las finanzas personales, que se generan a su vez por el desconocimiento del costo de endeudarse y el endeudamiento excesivo, así como por la pérdida del empleo, entre otras como los gastos médicos imprevistos o la reparación de la vivienda o del vehículo.
El sobreendeudamiento puede provocar algunas consecuencias económicas que agravan nuestra condición financiera por el pago de multas, de recargos e intereses moratorios y por el aumento de la deuda por intereses moratorios. Pero también afrontar gestiones de cobro o la ejecución hipotecaria y/o prendaria del acreedor que exige el pago ante el incumplimiento de la obligación contraída y constituida en el contrato como garantías —claro está, siguiendo el debido proceso ante los tribunales correspondientes, instancias que también pueden ordenar el embargo del salario, de bienes muebles e inmuebles—, así como afectar el historial crediticio de la persona, los reportes a los burós de crédito y hasta problemas de salud a causa del estrés excesivo.
Para evitar los inconvenientes del sobreendeudamiento, presta atención a las siguientes situaciones que te advierten que estás en riesgo o condición de sobreendeudamiento:
Falta de liquidez: si al realizar las compras y gastos mensuales necesitas recurrir a la tarjeta de crédito, a préstamos o adelantos salariales.
Pago de una deuda con otra: si empleas préstamos o adelantos salariales para pagar otras tarjetas u otro tipo de deuda.
Retraso o incumplimiento en los pagos: Si dejas de pagar una deuda por mínima que sea ante la falta de liquidez.
Aunque es fácil conocer nuestros ingresos mensuales y determinar si alcanzan para pagar nuestros gastos y deudas, existen situaciones que impiden que nos demos cuenta de que estamos adquiriendo más deudas de las que podemos pagar.
Luego de conocer las causas y las consecuencias del sobreendeudamiento deviene la gran pregunta: ¿cómo logro salir del sobreendeudamiento? Si te encuentras en riesgo o ya estás en sobreendeudamiento, debes prestar mucha atención a los siguientes consejos que te ayudarán a salir de esta condición:
Organiza y controla los gastos mensuales. Destina al menos el 70 % de tus ingresos al pago de tus necesidades básicas y el remanente del 30 % a pagar deudas.
Evita contraer más deudas u obligaciones, con este fin es conveniente reducir o eliminar el uso excesivo de las tarjetas de crédito como medio de financiamiento y evitar productos financieros como los adelantos salariales.
Elimina los gastos innecesarios, debes analizar uno a uno tus gastos mensuales para definir qué gasto puedes cubrir y de cuál puedes prescindir.
Elabora y gestiona un presupuesto, no solo para cubrir tus necesidades, sino para pagar las deudas contraídas.
Acércate a la Defensoría del Consumidor para consejería financiera. Contáctanos por nuestra línea directa 910 o escribe al WhatsApp 7844-1482.
Nuestra institución está atenta a apoyarte y contribuir para encontrar una solución integral a tu problema de sobreendeudamiento.
Mantener saludable nuestras finanzas personales requiere de disciplina financiera y apego a la decisión de cambiar nuestros patrones de consumo. ¡Vamos, sí se puede!