En uno de mis artículos anteriores tratamos el juicio del gran trono blanco, donde se juzgará a todos los hombres y mujeres que vivieron a lo largo de la historia y se realizará después del reino de 1,000 años de Jesús en la Tierra.
El tribunal de Cristo es exclusivamente para los cristianos, los creyentes en la fe y las enseñanzas de nuestro Señor Jesucristo, el cual se realizará en el cielo después del arrebatamiento de los cristianos de las diferentes iglesias, de todos aquellos que confesaron a Cristo como su salvador y perseveraron en la fe.
La Biblia menciona que los cristianos daremos cuenta en ese tribunal uno por uno, y nos evaluarán por todas y cada una de nuestras acciones, palabras, pensamientos, sentimientos y negligencias desde el momento en que recibimos al Señor Jesucristo en nuestras vidas hasta el momento de nuestra muerte.
Segunda de Corintios 5:10 dice: «Porque es necesario que todos nosotros comparezcamos ante el tribunal de Cristo para que cada uno reciba según lo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo, sea bueno o sea malo».
El Señor no juzgará a los cristianos por los pecados anteriores a su conversión; si se arrepintió de corazón, sus anteriores pecados son olvidados, pero está claro que se refiere este tribunal a cristianos, no a incrédulos, solo involucra a creyentes que dan cuenta de sus vidas.
El tribunal de Cristo no determina la salvación, esa ya fue determinada por el sacrificio de Cristo y su muerte en la cruz; en este tribunal los cristianos serán recompensados con base en cuán fielmente sirvieron a nuestro Señor Jesucristo; 1.ª de Corintios 3:14 dice: «Si permanece la obra de alguno que sobreedificó, él recibirá recompensa; si la obra de alguno se quema, él sufrirá pérdida, si bien él mismo será salvo…».
La Biblia habla de creyentes recibiendo coronas por diferentes cosas, basados en cuán fielmente sirvieron a Cristo.
El propósito de este tribunal es una exhaustiva evaluación que examina la vida completa del cristiano, y seremos recompensados por la obra que hemos hecho, sea buena o mala estando ya en la vida cristiana; se evaluará el valor real de nuestro amor y servicio al Señor.
Muchos sirven al Señor por vanidad, para ser admirados, otros por títulos y posiciones, pastores que hacen de la fe una mercancía y buscan enriquecerse, otros que no tienen amor para su prójimo y no ayudan a los necesitados, solo demuestran tener talento para beneficio propio, solo buscan ser reconocidos y aplaudidos, se vuelven egoístas y ambiciosos, estos no aman al Gran Rey, y tales actitudes serán reveladas en el tribunal de Cristo; si bien podrán ser salvos, no recibirán ninguna recompensa y se retirarán avergonzados delante del Señor.
Todos los cristianos tenemos el deber de hacer algo; Cristo dijo que hasta un vaso de agua que tú dieras a tus hermanos en su nombre será recompensado, toda buena obra se va a declarar para recompensa, la vida en Cristo la vas a estar edificando con la obra que haces al servicio cristiano y de la forma en que sirves al Señor, si tienes un ministerio o si ayudas en tu iglesia en cualquier área, sea de anfitrión, acomodación, en limpieza, recogiendo ofrendas, en la alabanza, entre otras.
Hay muchas cosas en las que tú puedes servir por amor al Señor. La Biblia dice que el que está en Cristo nueva criatura es, esto significa que los cristianos no serán juzgados por lo que hicieron antes de su conversión.
Muchos cristianos piensan que lo importante es llegar al cielo; la Biblia nos dice lo contrario: menciona que los cristianos que nunca dieron frutos, los carnales y apáticos, si bien serán salvos, no recibirán ninguna recompensa y se lamentarán eternamente por esa pérdida y además serán avergonzados.
Dios nos salvó para que diéramos frutos, algunos desperdiciaron esa vida, vivieron negativamente y creyeron que cumplir con algunas asistencias y ritos era suficiente.
Cada uno dará cuenta de sí. De todos los pecados no confesados en la Tierra daremos cuenta en el tribunal de Cristo, porque Dios no puede ser burlado.
Entonces, no descansemos de hacer el bien, ayuda a tu hermano si puedes hacerlo, da comida al necesitado, da ropa al que no tiene. Todas nuestras acciones de caridad serán recompensadas.
Trata de vivir en paz lo más que puedas y abre tu boca para hablar el bien, no juzgues ni critiques a nadie, no nos corresponde a nosotros juzgar a nuestros hermanos, no te olvides de que se evaluará nuestro grado de santidad, seremos galardonados y premiados por las obras que hagamos y glorifiquen al Señor.
Apocalipsis 22:12 dice: «He aquí yo vengo pronto y mi galardón conmigo para recompensar a cada uno según sea su obra». Los pastores y siervos fieles, honestos, recibirán recompensa por su esfuerzo, dedicación y santidad; 1.ª de Pedro 5:4 dice: «Y cuando aparezca el príncipe de los pastores, vosotros recibiréis la corona incorruptible de gloria».
Personas que causaron divisiones en las iglesias por motivos egoístas sufrirán grandes pérdidas. La Biblia dice: «Ay de aquel que se atreva a destruir la vida de un hermano, porque su cuerpo es templo de Dios».
Romanos 14:10 dice: «Tú, pues, ¿por qué juzgas a tu hermano? O tú también, ¿por qué menosprecias a tu hermano? Porque todos compareceremos ante el tribunal de Cristo».